"A medida que iba avanzando me di cuenta de que la modelo en la que me inspiré para la violonchelista era muy parecida a la hija de una vecina, que además estaba súper volcada con el mural. Así que decidí modificarle algunas cosas, le puse una peca que la chica tiene sobre el labio para que se pareciese más, y cuando la madre lo vio se emocionó toda. Venía hasta con los ojos llorosos".